martes, 29 de julio de 2014

Aveces, como hoy, como en este momento, cuando me nace la urgencia de oír tu sonrisa, de ver tus ojos, de acariciar tu mano, de besarte desde los labios hasta el alma, cuando tengo esta necesidad de alimentar mi espíritu en el aprendizaje de las curvas de tu cuerpo y el sabor de tu piel, en momentos trágicos como éste en que estás tan lejos y aún teniéndote cerca tus labios aún siguen lejanos, en estos momentos de latidos amorosos es cuando ni el recuerdo me calma.

miércoles, 2 de julio de 2014

Si es que algún día te tengo tendría entre mis motivos para pedirle al viento el oxígeno de un nuevo respiro ese abrigo de tu piel, la conquista de tu cuerpo al amparo de la noche, que el premio al afán de cada amanecer sea tu sonrisa y el placer de tu pasión a las garras de las ganas que me despiertas solo con ese mirar, en el brillo de esos ojos que en sí mismos tienen algo del vuelo de un ángel en cada parpadeo porque para definirte no basta la belleza pero para definir la belleza solo basta tu cuerpo desnudo.