jueves, 19 de noviembre de 2020

Cuando me detengo a observarte logras llevarme a un estado sin tiempo, porque en mi presente traes mi pasado y a mi futuro. De mi pasado traes aquel ideal que formé en mi adolescencia de la mujer con la que anhelé consagrar mis días, de mi futuro traes en anhelo de ser el último hombre de tu vida, el que te acompañe hasta el ocaso con la satisfacción de que te di lo mejor que soy para alimentar con mi amor tu felicidad y así vivir nuestra felicidad, amo cada segundo en que secuestras mi tiempo y me dejas viviendo en un lapso suspendido en el tiempo sin tiempo.

miércoles, 18 de noviembre de 2020

Tus ojos tienen un brillo que despiertan un ánimo en mi alma de conocer más de la tuya, de colarme por ellos y descubrir la magia en tu interior, de embelesarme ante la perfección de la amalgama de tus imperfecciones, de ver tus defectos más como virtudes que van germinando y creciendo a la sombra y cuidado de tus virtudes que te hacen florecer, agazaparme y admirar como te reinventas en las estaciones, descifrar esa fuerza que mantiene viva tu llama interna, esa inquebrantable voluntad que te hace levantarte cada vez que lo precisas y que te hace levantar a quien lo necesita, en fin cómo te reconstruyes después de algún derribo y tus poderes de regeneración en otros. No quiero quedarme solo con la superficialidad de lo que mis limitados ojos advierten de ti, quiero ver las alegrías detrás de tus lágrimas y los dolores detrás de tus sonrisas, quiero ver como fluye el amor y la ternura por tus brazos cuando abrazas, quiero saber qué aviva la llama donde abrasas tus miedos, déjame aprender cómo es que no hay herida ni dolor que mermen tus latidos, enséñame la alquimia para convertir un revés en aprendizaje, un sacrificio en silencio, devolver una traición en bendición, un insulto en comprensión, un enojo en una risa. Quiero aprender a iluminar al mundo desde mi posible penumbra interna, quiero crecer y alcanzar tu altura en sabiduría y amor, quiero evolucionar contigo, a estar convencido que cuando hay amor no hay nada más fuerte que la voluntad, ni miedo más grande que la confianza en uno mismo.