Si algún día tus besos no tienen mejor destino que un suspiro, si andan condenados a volar errantes reclamando un cariño sin refugio, desde hoy te aseguro que mi alma con gusto los cuidará sin objeciones.

Quisiera que me dieras un beso ahí, donde lo das cuando tu sangre hierve de deseo, donde el buen recuerdo de ese beso no se te borra y hasta te despierta una sonrisa picara, un beso ahí donde te eriza la reacción de quien lo recibe.

Hoy siento frío, de aquel que congela desde la soledad, que hace tiritar los recuerdos, que convierten en hielo hasta la más amarga lágrima, mata de hipotermia a las ganas y a la esperanza, del frío que inmoviliza e inhabilita, de ese frío que solo tu cuerpo quita, ese frío que fortalece lo despiadado de tu ausencia.

Dicen que la belleza es subjetiva, que no hay una regla que defina a todos los gustos, pero es innegable que Dios, en su infinita misericordia, reparte entre nosotros trazos y trozos de ese paraíso que un día construyo para nosotros, nos brinda el aroma de una hermosa flor, la calidez de una mañana soleada, la serenidad de una lluvia ligera que hidrata el cansancio, la viveza de los colores de un arcoiris luego de una tormenta... y a veces, gracias a su amor, crea mujeres que reunen esas bendiciones y más, y no cabe discusión ante su belleza independientemente de la subjetividad, una de esas mujeres eres tú.

Por hoy te amo como si no hubiera mañana, como si fueramos los únicos en la tierra, por hoy te quiero amar para siempre, aunque nada es para siempre, no te prometo que mañana será igual, pero hoy quiero que mañana éste amor siga vivo y amarte cada día igual, más o mejor que hoy.

Ve y hazte una con quien gustes, entrégale tu alegría, amor, dedicación, miedos, pasiones, soledades, sueños, el ímpetu de tu juventud, tu optimismo, hazlo tu razón de ser, cumple tu capricho aunque él no te aliente, no te consienta, no te siga, no te contradiga, no te haga reflexionar y construya contigo una descendencia que descanse solo en el deseo y en las ganas, luego cuando te hayas dado cuenta que tu capricho te dejó más vacía, sin alegría, sin optimismo, sin sueños, sin ilusiones, sin ganas y sientas que lo único que te queda es intentar rescatar el tiempo de decepciones con alguien que siempre te amó por quien fuiste, eres y serás por favor llámame, puede que te esté eternamente agradecido por no destruir mi vida con alguien que no sabría valorarme.

Eres como esos pecados que no se confiesan, te deseo en lo secreto, en lo clandestino, eres ese pensamiento que se filtra en las ganas, mi lujuria te rinde culto, eres la luna llena que ensimisma a mi concupiscencia, mi sueño incumplido, el gusto que la vida me negó, mi gusto inalcanzable, mi placer ilegítimo, la oración que no me atrevo dirigirle a Dios, el sudor de esa fantasía pendiente, eres la que se llevaría mi alma en un beso.

Si me quieres solo como amigo, por mucho amor que esa amistad genere es algo que no me sirve, que no quiero, que no busco, por que mi corazón te ama como a una mujer, pero si no me amas como a un hombre me conformaría con creer que lo haces si me llegas a dar derechos que le niegas a los amigos pero que le das a los hombres, aunque no te amen y solo te deseen, no quiero vivir el dolor del idiota que te ve dejando de amar a un hombre y volviendo a amar a otro cuando yo te amo por quien eres, y sé que eso no te sirve, no lo quieres, no lo buscas, así que por mucho amor que nuestra amistad genere, son amores que no se mezclan, que no se unen, que no se complementan, que no se nutren aunque nos haga falta amar a alguien como tu y yo nos amamos.

Te amo, no espero que me correspondas, ni que me creas, te amo no por lo que recibo de ti, ni por lo que tienes, no te amo por que me gustes, por que me gustan muchas mujeres, pero no a todas las amo, de hecho ni siquiera sé porqué te amo, me basta que seas tu, tu mirada, tu sonrisa, tu voz, lo que me hace sentir tu existencia, tu presencia, no me importa si no soy el primero que te ha amado, ni me interesa ser el último que lo haga, solo sé que hoy te amo, sin importar cómo reacciones, sin importar si te importa.

Sálvame de brazos temporales, de ese latir efímero, de esos besos genéricos que deseo que tengan sabor a ti, sálvame de esas caricias que se disfrazan de tu piel, de esos cuerpos que me ofrecen los placeres que lucho por merecer vivir contigo, arrebátame de esas ofertas que prometen apalear mis ganas de ti, hazme creer al menos temporalmente que todo lo que necesito de ti me lo darás permanentemente porque mi vida ha hecho un espacio y molde para tus brazos, mi corazón ha aprendido a latir a tu ritmo, mis besos se quieren especializar en tu alma, mi piel se quiere aclimatar solo a la tuya y mi cuerpo tiene un espacio hecho solo para ti.

En primera me gustas, me atraes mucho! me pareces una mujer extremadamente hermosa, bella, preciosa... todo de tu cuerpo me gusta, todo! pero todo eso no seria nada sin lo agradable de tu compañía, de tu personalidad, te amo también por que te admiro, tu tenacidad, tu optimismo constante a pesar de reveses, tu humanidad al pensar en los demás, tu valentía, tu coraje, todo eso... sé que a lo mejor eso no es suficiente para amar a alguien, lo que te dije son razones para amarte, pero a ciencia cierta, después de tanto tiempo, no sé qué es lo que me hace amarte, solo sé que te amo.

Una vez, al menos una vez quiero transformarme en aquel a quien amas, sentir en tus besos algo más que tus labios, que sientas en tus caricias algo más que mi piel, que no sientas ajena mi manera de amarte, sentir que al fin haces tuyo todo de mí, quiero ser en apariencia al que amas con tu esencia para que pueda amarte con toda mi esencia, al menos una vez que se confundan tus sentidos y sentirme plenamente amado por ti, y es que en mis anhelos me he vuelto tan terco que no deseo ser amado por alguien más que no seas tú, al menos una vez… cada noche.

Eres la suma de virtudes, defectos, traumas, habilidades, dones y mañas que más me gusta, porque es en tu imperfección y en la mía donde me gusta buscar la perfección de ambos, tu cuerpo no será el más apetecible del mundo, pero es el postre que más disfruto con todos mis sentidos, y es que mi placer tiene por fundamento el tuyo, es tu piel la que me deja el deseo de volver pronto a ti y tu temperatura el calor idóneo que mi alma necesita, aún no tengo claro si estoy enamorado de ti o si en verdad te amo, pero de lo que estoy seguro es que me brindas un placer que nada ni nadie iguala o supera.